La Unión de Criadores de Toros de Lidia acaba de enviar una Nota de Prensa a los medios de comunicación que resume las principales claves de la recién finalizada Feria de Abril de Sevilla y de cuyos resultados se extraen las siguientes conclusiones:

La Feria de Abril recién concluida ha supuesto en general un mejor juego de los toros que en años anteriores al que ha acompañado un buen resultado artístico, el buen rendimiento empresarial y, lo que es más importante, por la satisfacción de los aficionados.

La Junta Directiva de la Unión de Criadores agradece públicamente a los equipos gubernativos y presidenciales de la Plaza de Toros de La Maestranza de Sevilla la forma en la que se han conducido durante la pasada Feria de Abril, en lo que a los reconocimientos de los toros se refiere. La presencia de estos equipos en las ganaderías para la composición de los encierros ha sido un factor decisivo a la hora de producir un cambio sustancial respecto a temporadas anteriores, al registrarse notables descensos tanto en el número de toros que debía aportar un ganadero para la formación de corridas, como en el número de toros rechazados en los reconocimientos de plaza, en el número de toros devueltos.

Las limitaciones impuestas por la enfermedad de lengua azul al movimiento de reses ha obligado a encontrar soluciones que, a la postre, han sido positivas y esperanzadoras para el espectáculo. Desde hace más de diez años la Unión viene reclamando de las autoridades encargadas del control de la Fiesta que, al igual que ya se realiza con notable éxito en las plazas de Francia y en alguna del norte de España, los primeros reconocimientos, al menos los de las corridas de las Ferias más importantes, se realicen en las propias ganaderías porque se reducen considerablemente los riesgos sanitarios, de rechazos y devoluciones, al tiempo que mejora el rendimiento del espectáculo y se aminoran sustancialmente los gastos derivados del “trasiego de camiones”. Es de gran importancia ofrecer a los aficionados un clima de normalidad y seguridad a la hora de lidiar las corridas anunciadas. Este clima es también importantísimo para los lidiadores, para los empresarios y, por supuesto, para los ganaderos.

Por todo ello consideramos que lo ocurrido en Sevilla durante la pasada Feria es un claro camino a seguir por las más importantes plazas españolas que aún dudan de la conveniencia de ir cuanto antes, con todas las garantías necesarias, a establecer que el primer reconocimiento de realice en las ganaderías.

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