Real Unión de Criadores de Toros de Lidia

Crianza del toro de Lidia

Los ciclos anuales de crianza del Toro de lidia se dividen de la siguiente forma:

LA CUBRICIÓN

Cada ganadero tiene una planificación distinta de las cubriciones y por tanto, de las parideras, que se distribuyen en forma de campana de Gauss entre los meses de julio de un año y de junio del año siguiente, concentrándose en los meses de invierno. Los ganaderos planifican la fecha de nacimiento de los becerros (parideras), haciéndola coincidir con épocas del año en que las condiciones ambientales no son adversas, y en las que existe abundancia de recursos naturales. Las cubriciones se realizan en lotes de cubrición, generalmente por monta natural, en las cuales un semental convive con un lote de vacas en un cercado durante un tiempo.

El NACIMIENTO

El año ganadero transcurre desde el 1 de julio de un año hasta el 30 de junio del año siguiente. Las parideras (desde que nace el primer becerro de una camada hasta que nace el último) se ajustan más a los años ganaderos que a los años naturales (enero-diciembre), puesto que en los meses de invierno es cuando se producen mayor número de nacimientos.

Los partos se producen en su medio natural: la dehesa. La vaca, cuando percibe que va a parir, se refugia en un lugar alejado y protegido. La madre se come instintivamente la placenta para no dejar rastro y proteger a su cría. Al nacer, el becerro es lamido por su madre para estimular su circulación sanguínea y respiración. Cuando consigue ponerse en pie, mama de su madre los calostros (primera leche materna, rica en anticuerpos) que lo protegerán de posibles infecciones en los primeros meses de vida.

LA LACTANCIA

Primeras semanas: La madre tiene un extraordinario instinto maternal. El becerro se comunica con ella a través del berrido y copia todas sus reacciones.

4ª o 5ª semanas: El becerro comienza a ingerir hierba y agua, y se empieza a desarrollar su aparato digestivo.

A partir de la 5ª semana: Se incrementan las necesidades alimenticias del becerro como animal rumiante o poligástrico (4 estómagos: el retículo o redecilla, omaso, abomaso o librillo y el rumen o panza), por tanto, decrece la producción de leche de la madre, lo que supone una menor dependencia de la misma.

EL AHIJADO

El ahijado consiste en emparejar las crías con las madres, procediendo a una identificación supervisada por veterinarios técnicos del Libro Genealógico para su registro en el Libro Genealógico de la Raza Bovina de Lidia.

Los becerros deben estar previamente identificados de forma individual con los crotales en la oreja.

Destete: separación del becerro de su madre, se realiza de los 6 a los 7 meses de edad.

HERRADERO

El herradero supone la identificación definitiva e individual del becerro cuando a son separados de sus madres. Se realiza entre los 7 y los 12 meses de edad cotrolado por el veterinaio del Libro Geneaologi y siendo opcional la presencia del veterinario instepctor de la raza del MAPAMA.

RECRÍA

Después del herradero los animales se apartan en grupos en función de su sexo y edad hasta que llega el momento de la tienta o embarque. En la etapa de la recría el becerro continúa su crecimiento, comienza a defenderse, a desarrollar la jerarquía y la territorialidad. La alimentación en esta etapa es fundamental para el desarrollo del animal:

Añojo (1-2 años):

  • Comportamiento infantil.
  • Desarrollo del aparato digestivo rumiante.
  • Cambios hormonales: machos desarrollo de los caracteres sexuales secundarios.

Eral (2-3 años):

  • Comportamiento en grupo: hermanándose con otros.
  • Crecimiento de los cuernos.

Utrero (3-4 años):

  • Desarrollo muscular y óseo.
  • Juegos sexuales y peleas.
  • Comportamiento relativamente pacífico: moviéndose más despacio y rumiando muchas horas.

Cuatreño (4-5 años):

  • Animal adulto: cada vez más solitario.
  • Alimentación abundante: carácter pastueño, salvo momentos de crispación.
  • Peleas entre ellos.
  • Jerarquías de grupos consolidadas.
  • Gran desarrollo de la musculatura y la cobertura grasa.
Añojo
Erales
Utrero
Cuatreño

TIENTA

La tienta es una operación de campo para probar la bravura y las condiciones para la lidia de las reses. Se realiza fuera de la temporada taurina, entre los meses de otoño y de primavera, y el escenario es la plaza de tientas de la ganadería, en la que se emplea caballo de picar y puya de tientas, supone una prueba fundamental para seleccionar a futuros reproductores (machos y hembras).

Tientas de machos.

Tradicionalmente se han realizado pruebas de acoso y derribo, labor que se ejecuta a caballo en correderos adecuados mediante una collera de garrochistas. Para ello, se aparta la camada de erales, se acosan y derriban de uno en uno, y posteriormente son tentados con el caballo tentón (más ligero que el convencional) a campo abierto. Los animales que han demostrado buen comportamiento se retientan en la plaza con el caballo de picar. En este tipo de tientas al animal se le conduce al caballo a cuerpo limpio o con ayuda de ramas. En caso de pasar la prueba del caballo, se le toreará con la muleta, y en ese caso, el animal no puede ser llevado en la plaza.

Tienta de hembras.

La labor es distinta, ya que se tienta toda la camada de eralas (excepcionalmente utreras), en la plaza de tientas de la finca, usando capotes de salida, caballo de picar y muleta.

El tentadero es una de las operaciones más importantes de una ganadería brava, pues el ganadero decidirá qué animales aprueba como reproductores, y con ello, selecciona el futuro de la ganadería.

CONTROLES SANITARIOS

Los controles sanitarios son realizados anualmente, siendo de especial relevancia los ejecutados dentro del programa nacional de saneamiento y erradicación. Asimismo, hay que destacar las vacunaciones y revacunaciones de Lengua Azul. Cada ganadero vigila muy estrechamente las enfermedades propias de la comarca donde radica su explotación, siendo periódicas las desparasitaciones y vacunaciones de enterotoxemias, entre otras.

Las curas derivadas de las cornadas que se originan entre las reses de las explotaciones suponen por un lado un elevado coste económico para el ganadero, y por un control veterinario exhaustivo.

APARTADO

El apartado es una faena campera tradicional en la que interviene el personal de la ganadería a pie o a caballo para separar a determinadas reses del grupo con distintas finalidades.

EMBARQUE

Los toros seleccionados y apartados son conducidos a las instalaciones de la finca para embarcarlos en un camión con jaulas individuales para llevarlos a la plaza. Esta operación se realiza de madrugada.